Un título que une generaciones: Ferro encendió su mística y se coronó campeón de la Liga Sudamericana
Ferro Carril Oeste se consagró campeón de la Liga Sudamericana 2025 tras vencer 85-68 a Regatas, en una final que no solo devolvió al club a la cima, sino que
Ferro Carril Oeste se consagró campeón de la Liga Sudamericana 2025 tras vencer 85-68 a Regatas, en una final que no solo devolvió al club a la cima, sino que despertó recuerdos de la historia grande que el Verdolaga lleva grabada. Fue un partido que se construyó paso a paso, con la paciencia de quien sabe que la historia no se fuerza, sino que se deja fluir, y que conectó el esfuerzo actual con las raíces de una institución que marcó una época en el básquet argentino.
Desde el salto inicial, Regatas impuso su ritmo. Los correntinos, con su juego interior afilado, capitalizaron errores ajenos y cerraron el primer cuarto arriba por 19-16. Ferro, parecía tantear el terreno, como en aquellas noches de antaño donde el temple era la clave para revertir adversidades. Pero no tardó en ajustarse. Lezcano, con su visión de cancha, empezó a tejer los hilos del ataque, recordando sin pretensiones a líderes como Miguel Cortijo, que en los años dorados ordenaba con precisión quirúrgica.
El segundo parcial trajo el equilibrio. La defensa verdolaga se compactó, presionando pases y recuperando balones con una coordinación que evocaba los equipos de León Najnudel o Luis Martínez: colectiva, incansable. Defelippo emergió como pieza versátil, sumando 11 puntos, 8 rebotes y 4 asistencias, al estilo de aquellos aleros que definían el carácter de Ferro.
Torresi y Gallegos inyectaron intensidad desde el banco, haciendo que la rotación funcionara como un reloj, cada uno aportando lo justo en el momento preciso. El quiebre llegó en el tercer cuarto, un parcial de 33-13 que desarmó a Regatas. Jano Martínez, con tres triples al hilo, encendió la chispa ofensiva, trayendo a la memoria a tiradores como Gabriel Darrás o Javier Maretto, cuya muñeca caliente solía inclinar balanzas.
Vasirani, dominaba la pintura con rebotes firmes y definiciones seguras, similar a la presencia imponente que Diego Maggi imprimía en sus días. El público en el SUMA Conmebol sintió esa vibración, como si el Héctor Etchart hubiera trasplantado su alma a Asunción. En el cierre, Ferro administró con madurez. Lezcano controló el tempo, Piñero aportó en instantes clave, y Bettiga selló defensas con esa garra obrera que siempre lo caracterizó. Regatas intentó, pero la ventaja era ya inquebrantable. Al sonar la bocina, los abrazos en cancha fueron un tributo: no a la nostalgia, sino a la continuidad.
Este Ferro, armado íntegramente con jugadores nacionales —a diferencia de aquellos equipos ochenteros que se potenciaron con figuras extranjeras como James Thomas, Glenn Mosley o Ronald Charles—, volvió a conquistar el continente con un básquet auténtico, argentino y profundamente propio. Bajo la conducción de Federico Fernández, quien lleva cinco años moldeando un proyecto paciente y coherente, el Verdolaga no solo recuperó competitividad: reconstruyó una mística. Fernández logró que el equipo actual respire aquello que hizo grande al club, esa mezcla de trabajo silencioso, intensidad colectiva y sentido de pertenencia que definió a las camadas históricas. Por eso este título vale doble: porque no es solo una copa, sino la confirmación de que Ferro vuelve a ocupar su lugar en la élite desde su esencia, defendiendo valores que trascienden temporadas y trofeos. En Paraguay, la camiseta verde volvió a pesar como antes; y esta vez, con una identidad renovada que mira hacia adelante sin perder de vista su historia.
Síntesis
Ferro Carril Oeste (85): Lezcano 14, Defelippo 11, Jano Martínez 12, Bettiga 6, Diez 0 (fi); Torresi 8, Piñero 9, Gallegos 6, Vasirani 19, Rodríguez F. 0. DT: Federico Fernández.
Regatas Corrientes (68): Corbalán 5, Gramajo 11, Jaime 4, Ramírez 20, Gallizzi 12 (fi); Chiarini 7, Aguirre 0, Lugo 4, Santos 5, Larraza 0, Ferraro 0. DT: Juan Varas.
Árbitros: Julio Anaya (Panamá), Fernando Leite (Brasil), Orlando Varela (Honduras).
Parciales: 16-19, 20-18, 33-13, 16-18.